jueves, 26 de julio de 2018

¿SOLO LIBROS EN LA BIBLIOTECA? RECURSOS Y ESPACIOS LECTORES

INTRODUCCIÓN
La existencia de una biblioteca como simple fuente de conocimiento y acceso a los libros ha quedado notoriamente enriquecida con las actuales tecnologías y las posibilidades de interacción con el texto. Sin embargo, en muchos centros educativos encontramos todavía bibliotecas con material desfasado en sus estantes; espacios en los que el alumnado solo puede entrar en silencio o que se han convertido en almacén de aparatos obsoletos. Frente a estudiantes imbuidos en el mundo multimedia, este panorama resulta poco atractivo y motivador. 

OBJETIVOS
Esta intervención pretende, en consecuencia, sugerir propuestas para adaptar las bibliotecas de los centros educativos a las expectativas e intereses del alumnado actual y exponer actuaciones que sitúen a las bibliotecas de los centros del profesorado como modelo.

LA BIBLIOTECA HOY
Ante la evidencia manifestada en la introducción, consideramos necesario contar en las bibliotecas
con espacios dinámicos, cambiantes y abiertos al mundo, en los que ocupe también un papel importante el uso de la tecnología con un nivel adaptado a la edad y características de nuestros discentes. Serían así lugares que abren las puertas y se expanden por el centro y fuera de él, llegando de una manera más seductora a toda la comunidad educativa y, en especial, a nuestro alumnado. La Biblioteca del Centro abandona, por tanto, el papel de contenedor de saberes y pasa a ser un lugar de distribución de los mismos a la vez que de encuentro, un espacio que fomenta el manejo de habilidades necesarias para el desarrollo integral de nuestro alumnado. Corrobora este papel de la biblioteca escolar el reciente Plan de Fomento de la Lectura 2017-2020 del MEC (2017) donde explicita en su línea estratégica 2:
las actuaciones que se proponen en el Plan, que otorgarán especial importancia al papel de la biblioteca escolar, buscan potenciar la comprensión lectora, además de desarrollar las destrezas comunicativas básicas, tan necesarias para garantizar una plena participación en la sociedad de la información (p.34).

NO SOLO EL ALUMNADO
Obtener la complicidad de las familias facilita, por otra parte, la administración de estos espacios de lectura, fomenta la visión positiva y cercana de la biblioteca y propicia una mejor disposición del alumnado hacia ella. 
Así, su colaboración en la gestión (colocación en los estantes, tejuelado, fichado de ejemplares…), en la dinamización al participar en las actividades que se realizan, en la realización de propuestas bibliográficas que vean de interés para sus hijos o en el fomento de la lectura al convertirla en una actividad familiar, por ejemplo, amplifica la influencia y presencia de este espacio entre la comunidad escolar.
A su vez, el hacer visible la biblioteca y su promoción como zona compartida anima al profesorado a involucrarse en su gestión, a fomentarla como lugar de acceso a la información (texto escrito y multimedia), y a incluir la biblioteca en sus propuestas didácticas. 

NECESIDADES DEL PROFESORADO
En este acercamiento motivador a la lectura y a la biblioteca, el personal docente se ve con la necesidad de abordar diferentes recursos, muchos de ellos de reciente aparición. Nos encontramos con que debemos contar con técnicas de animación a la lectura adaptadas a la juventud actual, un incremento de la implicación familiar y la colaboración social en general (ayuntamientos, empresas, asociaciones…), la disposición de espacios de coordinación y encuentro con las familias para enriquecer la actividad cultural del Centro, un continuo acrecentamiento del conocimiento de herramientas TIC, el manejo de los diferentes códigos comunicativos, empleo de redes sociales, disposición de espacios de intercambio docente, acceso a bibliografía especializada, etc. Elementos que crean la necesidad de constante actualización para poder afrontar con soltura estos actuales recursos y nuevas formas de acceder a la narración: constante creación de apps que permiten interacturar con el texto, libros digitales enriquecidos, libros con códigos QR y marcadores de realidad aumentada, creación de cómics online, etc.  

LA BIBLIOTECA DE UN CENTRO DEL PROFESORADO: MODELAJE
Ante estas necesidades, la Biblioteca de un centro del profesorado debe de, a la vez que aporta materiales de apoyo y consulta, tratar de ejercer un modelaje para los docentes; esto incluye dinámicas de participación apoyadas en el uso del mundo digital (con sus diferentes formatos) que fomenten el acercamiento al libro con una visión del siglo XXI. Se sugieren de esta manera recursos y estrategias para integrar en la biblioteca del Centro y se incentiva que esta se constituya en centro cultural y formativo de la institución.
Es evidente que la tendencia de nuestra sociedad se dirige a la digitalización y la interacción permanente, esto conduce  a diversas situaciones: la necesidad de propiciar espacios de encuentro en nuestras bibliotecas escolares, la presencia de dispositivos móviles en nuestros colegios e institutos y la necesidad de que nuestro alumnado sea competente no solo en la interpretación texto escrito, sino también en los diferentes códigos audiovisuales y el manejo de plataformas online presentes en nuestro ámbito vital. Se trata de propiciar la alfabetización audiovisual, tecnológica e informacional que ayude al encaje de nuestros estudiantes en la sociedad actual y, por supuesto, en su futuro mundo laboral.
¿Qué herramientas estimamos entonces necesarias para el profesorado para su posterior implementación en la biblioteca escolar? ¿Qué empleamos a día de hoy a modo de prototipo en la Biblioteca del CEP? 
Tomando la biblioteca del CEP Las Palmas de Gran Canaria como ejemplo, hemos dividido estos aspectos y recursos en dos grupos: los que inciden en el entorno físico y los que lo hacen en el digital.
1. Aspectos físicos:
Intervenciones que facilitan el empleo del espacio y materiales presentes en la sala. Se concretan estas acciones en la habilitación de un lugar de lectura, la disposición de ordenadores para acceso a la red y carga de tabletas y móviles, la revisión de los fondos existentes y facilidad de acceso a los mismos, la reorganización y mantenimiento de las maletas viajeras (maletas temáticas que permiten llevar libros y otros recursos a los centros), la comunicación en la sala de novedades bibliográficas recibidas y la existencia de un espacio de intercambio de libros.
2. Aspectos digitales:
Estos son empleados para facilitar el acceso a la información, fondos, documentos en la Red y noticias relacionada con la Biblioteca. Citamos aquí aspectos que tienen que ver con la realidad aumentada y virtual, como son la fotografía esférica (próximamente el vídeo en 360 grados) que muestran la biblioteca y su evolución, el empleo de Second Life como espacio de encuentro virtual y acceso a material desde este entorno tridimensional y, por último, la Biblioteca digital organizada mediante códigos QR (BiblioteQRa) que fomenta la valoración del mlearning como facilitador del aprendizaje continuo y ubicuo. Además, el smartphone es también empleado como vía de comunicación de la Biblioteca a través de un canal en Telegram mediante el que se informa de las novedades. En la línea del fomento de la escucha, también se cuenta con una sección de podcasts que nos acercan el conocimiento a través de la comunicación oral, elemento que creemos que es importante potenciar ante la supremacía actual de la imagen. Referidos a los fondos bibliográficos, se puede acceder a los títulos de los mismos desde la Red y participar en la selección de nuevos ejemplares mediante la realización de sugerencias a través de formularios online. Por último, e insistiendo en la formación del profesorado, se facilitan enlaces a cursos relacionados con la animación lectora y la gestión de la biblioteca organizados por la Consejería de Educación y Universidades de Canarias. 
Todos estos recursos digitales quedan vertebrados por medio de un blog  que ofrece el acceso a los mismos por parte de los usuarios, así como a información sobre la actividad de la Biblioteca y diversos temas de interés.

CONCLUSIÓN
Al igual que sucede con la metodología en el aula, la biblioteca debe responder a los requisitos actuales y adaptarse a planteamientos sociales y tecnológicos acordes con los nuevos usos y necesidades. En este proceso, los centros del profesorado deben acompañar al docente e intentar ofrecer y canalizar modelos que se acomoden a estos requerimientos actuales para que, a su vez, puedan ser imitados y adaptados a la idiosincrasia de los diferentes espacios educativos.

¿Solo libros en la biblioteca? Recursos y espacios lectores.
20ª Conferencia Europea sobre Lectura y Escritura.
Trabajando juntos para fomentar la equidad a través de comunidades de lectura y escritura: un reto para el Siglo XXI
6º Foro iberoamericano sobre Literacidad y aprendizaje. Libro de actas (Pags. 96-100). Universidad Complutense de Madrid. 3-6 julio, 2017.